Sentimentalismo, transformado a Marketing

Si algo impresiona es como los sentimientos son capaces de mover masas, de convencerlas de una idea, de hacerlas participes de una actividad, pero también motiva a consumir. Los sentimientos logran crear un lazo entre las emociones de nuestros clientes potenciales y nuestros productos y/o servicios. Muchas marcas han invertido seriamente en este rubro del Neuromarketing, convirtiendo su marca en preferida de las masas al crear ese vinculo con los sentimientos.

Una marca que ha explotado este tipo de marketing es Coca Cola, que con el correr de los años siempre ha buscado la imagen familiar para promocionar su marca. Y es que la idea de mezclar sentimientos específicamente en nuestra región de América Latina es cada vez mas viable y asertivo. Los pueblos latinoamericanos por naturaleza toman sus decisiones a base de los sentimientos, en diferencia con otras culturas que usan el raciocinio, los latinoamericanos preferimos guiarnos por "eso" que nos despierta cierta marca, por corazonadas, o la sensación.

Aqui viene una palabra bastante clave que es: La Lealtad. Cuando creamos ese lazo con el consumidor creamos un vinculo de lealtad hacia nuestra marca y/o servicio, los sentimientos son los encargados de elaborar esa afinidad. De ahi la importancia de crear la empatia con todos nuestros clientes, de crear una empresa amigable, de solucionar sus necesidades y que ellos se sientan agradados y sentimentalmente afines a la marca.

Las emociones nos indican:

• Que le importa al cliente
• Como se relaciona el cliente con el proveedor de servicio (nuestra empresa)
• Como se comportara el cliente

Recordemos que la satisfacción es una actitud y la lealtad un comportamiento.

Un cliente leal puede atraer muchos clientes nuevos. Esto nos revela que mantener uno leal, es un esfuerzo el cual nos beneficia en adquirir nuevos clientes referidos. El compromiso entonces es convertir un cliente nuevo en uno leal, lo cual logramos al satisfacer sus necesidades emocionales.

La forma mas practica de cuidar emocionalmente a un cliente, es vigilar los pequeños detalles, ya que ahi damos a entender que no somos un proveedor de servicio sino un amigo que cuida a su amigo.